Una receta culinaria, receta de cocina o bien simplemente receta, en gastronomía, es una descripción ordenada de un procedimiento culinario. Suele consistir primero en una lista de ingredientes necesarios, seguido de una serie de instrucciones con la cual se elabora un plato o bien una bebida concretos.1 Acostumbra a incluir en algunos casos una lista de los aparejos de cocina adecuados para su realización. Ocasionalmente incluye una descripción social, histórica que motiva la receta.2
Las recetas pueden trasmitirse a lo largo de la historia de los pueblos, de generación en generación, a través de tradición oral, o bien escritas a través de su recopilación en libros de cocina o recetarios culinarios. Este conocimiento compilado forma parte esencial de la cultura de un grupo humano, su evolución permite conocer los cambios a los que se ve sometida una cultura. Su empleo en estudios sociológicos y antropológicos, o en historia deja conocer las condiciones culinarias, los gustos, e influencias de un periodo.3 En el siglo XXI las recetas culinarias aparecen frecuentemente en medios de comunicación como programas de televisión, revistas, periódicos y weblogs.
Una de las primeras evidencias documentales de recetas conocidas procede de 1600 a. C. en forma de tablilla de barro procedente del sur de Babilonia con escritura cuneiforme y expresada en idioma acadio.4 Los griegos tuvieron escritores culinarios dedicados como el versista Arquestrato, el fecundo escritor culinario Timáquides de Rodas. Ninguno de sus recetarios ha llegado a nuestros días. Uno de los primeros libros de recetas conocidos en la cocina occidental fue de De re coquinaria escrito por el chef romano Marco Gavio Apicio.
El nombre «receta» procede del latín recipere que indica por igual 'dar'/'recibir'. Inicialmente en los textos de recetas, los procesos culinarios se describían como una secuencia de instrucciones. El primer recetario medieval fue un manuscrito alemán del siglo XIII.5 La cocina de España tiene en el Libre del Sent Soví, mil trescientos veinticuatro uno de sus recetarios más antiguos.6
En Europa los cocineros franceses Antonin Carême y Georges Auguste Escoffier empiezan a delimitar las técnicas todo sobre el mundo de la cocina de la cocina, y entre su tarea la de compilar y sistematizar los procesos de cocina. En América del Norte Isabella Beeton escribe a fines del siglo XIX su Book of Household Management como uno de los primeros recetarios modernos.2 El fenómeno antropológico de las recetas culinarias, como transmisión de cultura fue estudiado por Claude Lévi-Strauss en su obra Les mythologiques 3: L'origine des manières de table (El origen de las formas en la mesa). En los años sesenta aparecen los programas de TV mostrando formas de cocinar.
Las recetas culinarias precedentes al siglo XX tenían más una estructura narrativa que dejaba cierta creación literaria paralela. Es precisamente en las primeras décadas del siglo veinte cuando aparece una estructura separada de ingredientes/procesos en la descripción de las recetas culinarias. Si la tradición oral se cristalizó en una literatura culinaria en forma de libros de cocina escritos desde el siglo XVIII, en el siglo XX las recetas se describen en programas de televisión, en revistas (especializadas o bien no), siendo además de esto muy populares en diversos blogs especializados.
Las recetas tienen unas normas y reglas precisas para su escritura.7 Si la receta se dirige al público generalmente, debería estar escrita en lenguaje plano. En muchos casos presuponen un conocimiento básico de las técnicas de cocina. Las recetas aparecen en general clasificadas en familias que se reúnen por ingrediente primordial, género de preparación, país, etcétera forman parte de un libro de cocina.
Las recetas formales incluyen como elementos:
Denominación del plato (o bien bebida) acompañada de su origen
Tiempo de preparación, y en algunas ocasiones la complicación valorada apropiadamente contra una escala. Generalmente para describir el tiempo que se dedicará a la preparación del plato se emplean unidades de tiempo expresadas en minutos, como máximo horas. La complicación del plato acostumbra a ser una combinación entre el número de ingredientes, el número de procesos y el tiempo empleado. Si el plato precisa de un intervalo de tiempo antes de ser servido, sería bueno que figurara en esta parte inicial.
Lista de ingredientes requeridos con sus cantidades o proporciones. Acostumbran a emplearse unidades de medida internacionales, locales o aun culinarias (como son cucharada, cucharadita, taza, pizca, ...). De la lista de ingredientes, y su cantidad asociada al número de raciones que se desea preparar, se expresa el número de porciones finales, si se desea otra cantidad se emplean reglas de proporcionalidad. Los ingredientes se ordenan conforme su orden de uso. Cuando la disponibilidad de los ingredientes resulta comprometida, acostumbra a indicarse ingredientes alternativos. De igual forma si los ingredientes pueden ser poco familiares, se suele hacer referencia a glosarios.
Herramientas empleadas necesarias para la preparación. Esta descripción no es habitual en la mayor parte de los textos. Se puede deducir de la descripción de los procesos. Una receta profesional incluye el tamaño de los recipientes a emplear.
Pasos a proseguir en orden cronológico. Esta secuencia de procesos comienza indicando los procesos de preparación de los ingredientes (picado, escaldado, fritura, cocción, etcétera, y finaliza con las labores de emplatado final y su puesta en la mesa. Suele tener una estructura enumerada en la que cada paso se incluye en todos y cada ítem.
En recetas editadas en libros, o recetarios culinarios, usualmente se incluye una fotografía del plato ya montado, y por lo general ya decorado para su muestra a los comensales. A veces incluye una ilustración secuenciada de los procesos más notables.8 Para mejorar la didáctica de la receta acostumbra a incluirse indicaciones sobre como elegir un buen ingrediente, detalles sobre la calidad de los mismos. Si el ingrediente indicado no es habitual al lector, proporcionar consejos sobre donde poder localizarlo. La inclusión sobre ciertos detalles empleados en las técnicas culinarias no habituales puede ayudar a un lector a reproducción exitosamente la receta.8 En las recetas se incluye a veces el cómputo total de calorías que supone su ingesta, así como cualquier indicación nutricional. En las recetas culinarias por lo general es menos deseable conocer el origen histórico, sociológico del plato. Y tiene propósito de mandar la receta a una persona para indicarle lo que debe hacer para cocinar